Tocar el infinito a través del YOGA
- Agustina Tramontini
- 21 jun
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 21 jun
Sentía que la vida me había ofrecido todo lo que quería manifestar,
Pero sin embargo no alcanzaba, estaba inquieta internamente, algo profundo clamaba.
Esa sensación sutil, pero persistente, de que la vida tenía algo más para mostrarme.
La búsqueda espiritual no dejaba de pulsar dentro mío. Ya nada externo podía satisfacer ese anhelo de expansión.
Así llegué al programa Ingeniería Interior, aunque en ese momento no pude acceder a la iniciación en Shambhavi Mahamudra porque aún no estaba disponible en español.

Un año más tarde, luego de un proceso de profundo impacto, llamado Pancha Bhutha Kriya, experiencia que hice online desde mi hogar en las sierras cordobesas, sentí una urgente necesidad de viajar al ashram, de estar cerca del Dhyanalinga, de sumergirme más profundo. Ese deseo quemaba, no lo podía evitar, se encendía más y más.
Volví a tomar el programa de ingeniería interior, y viajé a Buenos Aires para quedarme en la casa de una amiga —traductora de inglés a español— que me ayudó con la traducción del fin de semana, para poder finalmente iniciarme en Shambhavi.
Hoy, todo el programa ya está completamente disponible en español para todos los hispanohablantes.
Desde ese momento, comenzó una vorágine de cambios extraordinarios: una danza de bendiciones, apertura, bondad y gracia que me abrazó sin aviso.
A los tres meses ya estaba en India, sin saber inglés, pero profundamente confiada en la guía divina.
Hice Linga Seva, una de las mayores bendiciones de mi vida. La entrega total, la devoción, el servicio desinteresado, la energía poderosa de ese lugar... me atravesaron de formas que todavía no sé nombrar.

Pude estar en presencia de mi Gurú, tanto en su forma física como en su inmensa presencia sutil.
Participé en programas avanzados y Samyama, experiencias intensas, místicas que transformaron mi mente, mi cuerpo, mi percepción.
Este año 2025 tuve la bendición de poder viajar junto a mi familia para el ashram ( otro sueño hecho realidad ) y compartir con ellos la gracia de Sadhguru.
El amor de Sadhguru me conmueve, me desarma, me desborda…

Ni siquiera puedo definirlo porque lo limitaría y es ilimitado.
Su gracia tiene tanta dulzura que a veces ni siquiera la puedo soportar...
Me disuelve…
Y las lágrimas corren...
Y en ese desaparecer, toco el Infinito.
Nada de esto sería posible sin Él, sin su presencia, sin su infinita gracia. No me va a alcanzar esta vida para seguir agradeciendo...
A ti, mi amado SADHGURU porque me enseñaste a mirar hacia dentro. Que la única salida era adentro...A ti mi eterno e infinito agradecimiento
💫 La vida pulsa y nos toma por sorpresa con sus bendiciones para acercarnos a lo que siempre estuvo dentro.
Ojala esta historia sirva de espejo, de inspiración o de semilla para quien sienta que hay algo más…
Porque hay algo más.
Está dentro tuyo...

댓글